Cuando el nombre lo dice todo

Esta semana que ya estamos entrando en modo vacaciones, algo suave.

Te cuento un ejemplo que me chifla. Uno de los mejores aprendizajes de Marketing sin nudos 101: Si quieren paz bronquial, dales pazbronquial.

Así se llama un jarabe para la tos que me recetaron hace años. Glorioso naming. Mano de santo.

No se puede pedir más. No pido más a un mensaje vendedor.

Lo compraría de nuevo por primera vez, a ciegas, no necesito referencias. Si me das paz para mis bronquios en medio de una tormenta de ahogo y agujetas de tanto toser... venta asegurada. Gracias, señor farmacéutico.

Los textos que utilizas (en tu web, en presentaciones, en redes sociales, en tus emails) son parte de tu CONVERSACIÓN. Todo es una conversación con ellos: con tus colaboradores, potenciales clientes, partners o inversores.

Mensaje que ellos interpretarán a su manera. A su manera, no a la tuya, porque ellos tienen siempre la razón. Y si has leído esto que envié la semana pasada, lo sabes ;)

Más Marketing 101: Tu mensaje necesita convencer, QUE ENTIENDAN POR QUÉ tienen que decirte que sí, elegir tu idea, comprar tu propuesta, invertir en ti.

Para lograr eso, tu mensaje te necesita. Tú eres el mensajero. 

Las palabras que eliges, el lenguaje que utilizas, las metáforas que podrías usar para explicar tu idea son tus herramientas para deshacer nudos.

Si has pillado bien el insight y lo conviertes en un buen mensaje, ellos te compran. Compran su paz.

Feliz Navidad.