¿Qué hacer ante la duda?

Qué hacer anWhen in doubt? Tu plan. Y paciencia.

Ya tienes aquí toda la chicha que trae esto hoy. Estamos extra breves, sí. Estamos vacacionales aún, ¡yes! Y no tengo el teclado para más, que me llaman para bajar a la playa🏖

Si te falta la inspiración o las ganas... Sigue tu plan.

TU PLAN. El que trazaste, el que te guía, el que marca el camino que marcaste para ti cuando tenías más energía. Para eso se escriben.

Porque se escriben, eh.

Cuando se tienen por fin claros, los planes se escriben. Aunque sea a lápiz (para poder borrar, si acaso)

Para volver a ellos cuando flaqueamos. Cuando estamos desorientados —o al volver de vacaciones, ¿a que sí? ¿Tú ya estás de vuelta, al pie del cañón? Courage, dear heart.

El plan está ahí para recordarte por dónde ibas, a dónde vas.

Seguir el plan. Y paciencia.

Cambiar de plan. Y paciencia.

¿Un imprevisto? Reajuste. Y paciencia.

La paciencia, YES, es la madre de la ciencia. Vamos despacio porque tenemos prisa.

¿Que no tienes plan o no lo ves claro...? Aprende a trazar tus planes, querido caracol.

Adquirir este poder es algo de lo que nunca te podrás arrepentir y nunca nadie te lo podrá quitar. Va contigo adónde vayas, lo llevas siempre a cuesta (yo he aprendido a hacerlo y ahora otras personas aprenden de mi experiencia regalándose uno de mis programas)

¿Ante las dudas? Tu plan… y paciencia.