Ten a mano un desafío

Septiembre y sus cositas... Esa manía de hacernos volver a empezar.

Algunos dicen que es ahora cuando cambiamos de año.

Me lo creo. Ayer casi me compro una agenda escolar en papel en chez Tiger. Para anotar de puño y letra mis planes postvacacionales con bolis bonitos. (al final escogí un bullet planner que no restringe mi creatividad)

Para plantarle cara a Notion, Pocket, Feedly, Evernote... Tanta app y tanto móvil con la que puedes autogestionar milagrosamente las toneladas de información que acumulas y que te sirven para ir formándote —un poquito de nuevo conocimiento cada día.

Será la morriña de los campos abiertos que hemos dejado atrás, pero, de verdad, esta semana apetece ser menos digital y más de carne y hueso. Ha costado volver a las teclas. <3 Libros y libretas.

¿Escribes a mano tú? Es la mejor manera de pensar.

Lo dicen estudios científicos y mi humilde experiencia.

Los colores, el tacto suave del papel y el sonido al escribir son una pasarela segura.

Para entenderte, para prepararte, para centrarte.

Para proyectar y verte con tus ojos en esa situación futura que todavía no está aquí a “nuestro” alrededor (el tuyo sí, ¿lo ves?).

Trazas líneas, rutas, planes. Nuevas.

Haces nuevas las rutinas viejas, si es necesario.

Porque nuevos desafíos siempre a mano, necesitamos.

Y esto, Montse, mirado por el lado de un nudo bloqueante, ¿qué significaría?

Esto significa que no puedes dejar nunca que el apego, la comodidad o el aburrimiento coarten tus ganas de movimiento.

Sea para cambiar eso no te gusta nada. O bien sea para —uy, calla, mira qué me dice septiembre al oído…

Que los desafíos NUEVOS son el impulso que te lleva a dedicar energías a esas ideas en las que vale la pena perder horas.

IDEAS TUYAS. Y entusiasmarte.

PD: Si has estado fuera reconectándote contigo mismo y te has perdido algún nudito veraniego: los tienes aquí.